Los pueblos indígenas siguen sufriendo el racismo y la discriminación racial que limitan el disfrute de sus derechos políticos, económicos, sociales y culturales, afirmó el relator Especial sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en ocasión del Dia Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial.
“Este día es importante para recordar que los pueblos indígenas siguen sufriendo el racismo y la discriminación racial en el disfrute efectivo de sus derechos políticos, económicos, sociales y culturales”, dijo.
Cali, indígena maya kaqchikel, dijo que la Asamblea General de la ONU proclamó el 21 de marzo como el Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial, en 1966, para afirmar que todos los seres nacen libres e iguales y en dignidad y derechos, que tiene la capacidad de contribuir de manera constructiva al desarrollo y bienestar de la sociedad.
Además, la ONU “ha reiterado que todas las doctrinas de superioridad racial son científicamente falsas, moralmente condenables, socialmente injustas y peligrosas, y deben rechazarse, al igual que las teorías con las que pretenden determinar la existencia de razas humanas separadas”, acotó.
Los pueblos indígenas —dijo Cali— sufrieron diversas formas de discriminación racial desde la colonización, que provocó la desaparición física y cultural de muchos pueblos indígenas. “Aunque mucho ha cambiado desde la colonización, esta injusticia y trauma histórica sigue presente hasta el día de hoy”, agregó.
Para eliminar la discriminación, Cali sostuvo que los Estados deben ratificar los distintos tratados internacionales en materia de lucha contra la discriminación racial, en particular la Convención Internacional para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación Racial, y también, aceptar la competencia del Comité bajo el artículo 14, de la misma Convención.
Cali considera que es necesario reconocer la situación de los Pueblos Indígenas, enmendar los errores del pasado y de reconocer y proteger su especificidad cultural, por ejemplo, mediante la adopción de acciones positivas, como dar cuotas específicas para los indígenas en los parlamentos.
“Los Estados han expresado su preocupación por que un marco legal propio para los pueblos indígenas puede producir discriminación inversa. Sin embargo, desde mi punto de vista son medidas positivas las que se tienen que implementar, porque no podemos hablar de una igualdad, una equidad en este momento, cuando la situación no cambia, la situación económica, social y cultural no cambian. Solo vamos a elevar la situación que se está viviendo es, pero sin eliminar esa esa distinción que hay en este momento”, dijo.
Cali añadió que es importante, la ratificación del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo que permite el reconocimiento de la existencia de los Pueblos Indígenas sin la necesidad de trámites burocráticos ni estatales. “Que sean los propios pueblos indígenas los que se autoidentifiquen como tales, y no sea el Estado el que tenga que hacer estudios antropológicos para decir quién es o no indígena”, dijo.
“Esto significa que hay una gran necesidad de ese reconocimiento, pero ese reconocimiento va adherido el derecho de los pueblos indígenas, a la libre determinación; y a la libre determinación va adherido también el derecho que tienen los pueblos indígenas al reconociendo de sus tierras, territorios y los recursos que hay en estos territorios”, señaló.
El relator dijo que es fundamental la educación y también hablar de la historia real de los pueblos indígenas, qué es lo que les pasó históricamente, a qué fueron sometidos; pero también qué es lo que los Pueblos Indígenas pueden dar en este momento a la humanidad, para sacarla de la crisis en que se encuentran debido al cambio climático.