NUEVA YORK, Sep 21 (FILAC) – A través del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC), los Pueblos Indígenas de América Latina pidieron hoy a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y a sus países miembros que incluyan en la Agenda 2030 y los compromisos de la Cumbre del Futuro sus conocimientos, saberes, experiencias y buenas prácticas.
Estas propuestas fueron desarrolladas en cuatro diálogos participativos organizados entre agosto y septiembre del presente año por el FILAC, en coordinación con la Secretaria General Iberoamericana (SEGIB).
Durante los diálogos participaron juventudes y mujeres de más de 50 organizaciones de redes regionales y subregionales de Pueblos Indígenas de 19 países del continente y los primeros resultados fueron socializados con representantes de Estados y organismos internacionales.
Conforme a la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas y a poco de cumplir diez años de la sesión de Alto Nivel de la ONU, conocida como la Conferencia Mundial de Pueblos Indígenas, en donde los Estados adoptaron el Documento Final de la Conferencia Mundial sobre los Pueblos Indígenas, se reiteró que los Pueblos Indígenas tienen derecho a determinar y definir prioridades y estrategias para el ejercicio de su derecho al desarrollo, además del compromiso de los Estados de tomar en consideración todos los derechos de los Pueblos Indígenas al diseñar la Agenda para el Desarrollo Post-2015.
La realidad demostró que los derechos de los Pueblos Indígenas no fueron tomados en cuenta al elaborar la Agenda 2030. En los Objetivos de Desarrollo Sostenible, las pocas veces que se refieren a los indígenas, lo hacen considerándolos de manera individual y como una parte de la larga lista de los “vulnerables”.
“La agenda indígena termina beneficiando a todo el planeta. Teniendo en cuenta que los Pueblos Indígenas hoy representan sólo el cinco por ciento de la población mundial y protegen el 32 por ciento de la biodiversidad, esto significa que los Pueblos Indígenas también deben participar en la toma de decisiones. Necesitamos ampliar la participación indígena en la toma de decisiones climáticas”, expresó Sônia Guajajara, Ministra de Pueblos Indígenas de Brasil.
Además, no hay indicadores de las metas sobre Pueblos Indígenas y menos alguna referencia a la riqueza cultural, social, espiritual ni de ningún tipo, en donde se mencione el acervo cultural que representan los Pueblos Indígenas para el mundo.
Por estos motivos, los Pueblos Indígenas piden una relectura e implementación de los ODS en clave intercultural, considerando la realidad del mundo en el cual conviven múltiples culturas, las cuales tenemos mucho para aportar hacia un desarrollo humano sostenible, inclusivo y de respeto a la madre tierra. En donde los derechos de las mujeres y juventudes indígenas formen parte de los derechos colectivos de los Pueblos Indígenas, con sus particularidades y necesidades específicas.
“El propósito de la Cumbre del Futuro es avanzar en posiciones que hasta ahora no se han podido avanzar, entre ellos la implementación de los ODS y la Agenda 2030. Esta cumbre hace bastante énfasis en los jóvenes y las mujeres, pero se ha reducido la mención a los Pueblos Indígenas. La mención a los Pueblos Indígenas en toda la discusión de la Cumbre del Futuro ha sido muy reducida y eso debe ser una alerta para todos nosotros”, dijo Diego Pary, Embajador del Estado Plurinacional de Bolivia ante la Organización de las Naciones Unidas.
La Cumbre del Futuro debe abordar los vacíos que no contempla la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible, a través de indicadores y metas que incluyan a los Pueblos Indígenas, así como nuevos acuerdos intergubernamentales para forjar un nuevo pacto social sobre cómo prepararnos para un futuro plagado de desafíos y riesgos, pero también de oportunidades. Es por ello por lo que la inclusión de la visión de los Pueblos Indígenas, de las Mujeres y Juventudes, sus conocimientos, experiencias y buenas prácticas contribuirá a adecuar y reforzar la implementación de la Agenda 2030 y los compromisos que se asuman en la Cumbre del Futuro.
“Exhorto a los Estados a que, en este proceso preparatorio rumbo a la Cumbre del Futuro de 2024, incluyan durante la negociación, en el documento del pacto del futuro y en su posterior implementación a los Pueblos Indígenas. Asimismo, solicito a los Organismos, fondos, programas y agencias de las Naciones Unidas a coadyuvar en esta importante labor, en consulta con el FILAC, a nivel regional, por su naturaleza paritaria y experiencia de más de 31 años en la promoción del autodesarrollo de los Pueblos Indígenas, para lograr los ODS y los compromisos que se asuman en la Cumbre del Futuro”, añadió Freddy Mamani, Vicecanciller de Bolivia y Presidente del Consejo Directivo de FILAC.
Principales propuestas de los Pueblos Indígenas
Entre las principales propuestas de los Pueblos Indígenas, que surgieron en los diálogos facilitados por el FILAC están el respeto, reconocimiento y promoción de los modelos de vida indígena como una alternativa para salvar el planeta y, por ende, conservar los recursos naturales de la Madre Tierra, disminuir los impactos del cambio climático y promover el desarrollo sostenible.
“Los Pueblos Indígenas coinciden en que la Cumbre del Futuro es la oportunidad precisamente para cambiar esa visión de futuro, esa visión de desarrollo, poder efectivamente, incorporar la visión del Buen Vivir o de desarrollo libre y determinado de los Pueblos Indígenas, hemos concluido en las consultas, que sí efectivamente queremos apostar por el multilateralismo. Queremos llevar nuestras propias voces, ser nosotros los que hablemos por nosotros”, señaló Myrna Cunningham, Primera Vicepresidenta del FILAC.
Promover la elaboración y aplicación de leyes y prácticas que reconozcan, respeten y garanticen los derechos de los Pueblos Indígenas sobre tierra, territorios y recursos naturales de la Madre Tierra.
También recomiendan garantizar la participación plena y efectiva de los Pueblos Indígenas, en los planes, proyectos, políticas que se desarrollen y que les impacta de forma directa e indirecta en la visión del Buen Vivir – Vivir Bien – Vida Plena, en tierras, territorios, identidad y cultura.
Las mujeres indígenas recomendaron tener una participación activa en el cumplimiento de los resultados de la Cumbre del Futuro y que se definan metas e indicadores relacionados a mecanismos efectivos que erradiquen las violencias contra las mujeres indígenas y al cumplimiento de la Recomendación General N. 39 de la CEDAW.
Por su parte, las juventudes indígenas recomendaron la creación de un Observatorio de la Juventud Indígena para monitorear los resultados de la Cumbre del Futuro, la participación plena de las juventudes en la toma de decisiones, así como su participación a través de los puntos focales en las entidades de naciones Unidas, su fortalecimiento de capacidades sobre los ODS y su compromiso para la cumbre del Futuro, para tener herramientas que permitan incluir en avance y cumplimiento.
El fomento de programas de vivienda y servicios esenciales, el reconocimiento y la incorporación de los conocimientos y medicinas tradicionales en los sistemas de salud nacionales, la revisión y actualización de los planes de estudio para incluir la enseñanza en lenguas maternas, así como el estímulo de sistemas económicos indígenas y la asignación de recursos financieros directos a las comunidades indígenas, son otras de las propuestas.
Los Pueblos Indígenas invitan a comprender un mundo en armonía entre seres humanos y la Madre Tierra, en donde su propuesta de desarrollo, bajo el paradigma del Buen Vivir-Vivir Bien-Vida Plena, se entienda como una nueva forma de pacto social y ambiental que viabilice el desarrollo sostenible y así, nadie se quede atrás.
Guardianes de la vida y biodiversidad del planeta
Según datos de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe – CEPAL, Abya Yala tiene una población de 660,269,100, de estos, 58,180,000 pertenecen a Pueblos Indígenas, representando el 9.8% de la población total de la región. En Abya Yala cohabitan 826 Pueblos Indígenas. De acuerdo con la ONU, se hablan 420 lenguas indígenas, de estas el 40% se encuentra en peligro de extinción.
Los Pueblos Indígenas son guardianes de la biodiversidad, en Centroamérica, se encuentran las áreas protegidas más ricas en biodiversidad establecidas sobre territorios de Pueblos Indígenas, aproximadamente el 39% de estas.
La dimensión territorial de la Amazonía es de 7,4 millones de km2 representa el 4,9% del área continental mundial y es considerada el bosque tropical más extenso del mundo; sin embargo, una variedad de proyectos relacionados con hidrocarburos, minería, explotación de madera de origen ilegal, amenazan su integridad y provocan desplazamientos de los más de 400 Pueblos Indígenas, especies y ecosistemas.
Se estima que el 45% de los bosques intactos de la cuenca amazónica se encuentran en territorios indígenas. Entre los años 2000 y 2016 ha tenido una disminución de 4,9% entre en las áreas indígenas de la región, mientras que en las áreas no indígenas se redujo en un 11,2%.
Las propuestas presentadas el día de hoy, serán socializados con las Misiones Permanentes de los Estados miembros de las Naciones Unidas y con todas las instituciones de las Naciones Unidas, a fin de que durante las negociaciones, en el pacto del futuro y durante su implementación quede la visión, conocimientos, saberes, experiencia y buenas prácticas de los Pueblos Indígenas
