El 32% de la población indígena en la región se dedicaba a la agricultura, mientras que la cifra para los no indígenas era del 12,3%.
CARTAGENA, Ago 27 (FILAC) – El Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC) y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) han llegado a un acuerdo de colaboración en pro del respeto y promoción de los derechos de los Pueblos Indígenas en la región.
Este acuerdo se enfoca en áreas clave como la prevención de violaciones de sus derechos, la resolución de conflictos y la difusión de instrumentos metodológicos para fomentar el diálogo intercultural entre los Pueblos Indígenas, el sector empresarial y los gobiernos.
Sônia Guajajara, Ministra de Pueblos Indígenas de Brasil y Presidenta de FILAC, destacó la importancia de esta alianza en el contexto de los 30 años de trayectoria de nuestra institución paritaria, compuesta por 22 países iberoamericanos.
“Con la firma de este acuerdo, consolidamos una nueva alianza con un socio estratégico como la OIT, que nos permitirá respaldar el Plan de Acción Iberoamericano para el pleno ejercicio de los derechos de los Pueblos Indígenas, a través de espacios de diálogo y mecanismos de participación, consulta e incidencia en las políticas públicas y en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030”, señaló Guajajara.
También resaltó que, bajo este compromiso, se han iniciado esfuerzos conjuntos entre la OIT y FILAC para identificar áreas de cooperación en materia de Pueblos Indígenas y plasmarlas en un acuerdo que establece líneas estratégicas bajo el mandato de cada institución.
Por su parte, Ana Virginia Moreira, Directora de la Oficina Regional de la OIT para América Latina y el Caribe, afirmó que esta organización ha estado comprometida con las cuestiones relacionadas con los Pueblos Indígenas y Tribales desde la década de 1920.
“La OIT es responsable del Convenio sobre Pueblos Indígenas y Tribales de 1989 (núm. 169), el único tratado internacional abierto a la ratificación que se enfoca exclusivamente en los derechos de estos Pueblos”, dijo Moreira. Señaló que este convenio, ampliamente ratificado en nuestra región (15 países), ha inspirado el desarrollo de legislación y políticas, pero es necesario seguir trabajando para garantizar que los Pueblos Indígenas estén en el centro de un desarrollo inclusivo.
Moreira también presentó datos que resaltan la urgencia de esta cooperación: “A nivel global, los Pueblos Indígenas representan más de 476 millones de personas y el 8,5% de la población en América Latina y el Caribe es indígena, siendo la mayor proporción en comparación con otras regiones.
Además, América Latina es la región donde mayormente los Pueblos Indígenas viven en zonas urbanas. Al menos el 52% de ellos reside en áreas urbanas, posiblemente motivados por el acceso a servicios, trabajo o desplazados por conflictos, violencia, desposesión de tierras o el impacto del cambio climático”. Asimismo, señaló que los Pueblos Indígenas se dedican principalmente a la economía informal, siendo aún mayor esta realidad para mujeres indígenas, con un 85% de ellas trabajando en esta economía sin protección social.
Ante esta realidad, es importante destacar el papel y la relevancia del Convenio de la OIT sobre Pueblos Indígenas y Tribales de 1989 (núm. 169), el cual proporciona un marco sólido para transformar los retos en oportunidades y sus disposiciones son una herramienta efectiva para abordar las brechas de desigualdad, a la vez que contribuye a la construcción de la paz y la justicia. Por su parte, la directora regional de la OIT enfatizó la importancia de garantizar la participación efectiva de los Pueblos Indígenas en la toma de decisiones, incluyendo la participación activa de mujeres indígenas, para asegurar que sus prioridades de desarrollo sean tomadas en cuenta en la esfera pública.
Moreira enfatizó que “FILAC es y seguirá siendo un socio importante para avanzar en la materialización de los derechos de los Pueblos Indígenas. Durante esta alianza, la OIT ha tenido la oportunidad de participar en las discusiones que llevaron a la creación de FILAC”.
Con la firma de este Memorando, la OIT y FILAC se comprometen a trabajar conjuntamente en la promoción y protección de los derechos de los Pueblos Indígenas, y en la implementación de estándares internacionales, con especial enfoque en el Convenio núm. 169.