ColombiaInforma.- La historia del Consejo Regional Indígena del Cauca -CRIC- es de la lucha y la resistencia de los pueblos indígenas en Colombia. Por esto, la conmemoración de los 50 años de la fundación del CRIC no pasa por alto.
El 24 de febrero de 1971 siete Cabildos e igual número de Resguardos indígenas se reunieron para crear el Consejo Regional Indígena del Cauca, en el municipio Toribío (Cauca). Unidad, tierra, cultura y autonomía que han sido los móviles de lucha y resistencia histórica de esta organización.
En septiembre de ese mismo año se realizó en el corregimiento de Tacueyó (Toribío) el Segundo Congreso del CRIC. Allí se definieron los puntos del programa político, con exigencias que constituyeron el eje del movimiento indígena. Estos ejes, además, eran la síntesis de las enseñanzas de líderes como La Gaitana, Juán Tama y Manuel Quintín Lame, memorables dentro de la organización de las comunidades indígenas porque dieron sus vidas para exigir los derechos de los pueblos indígenas en Colombia.
Aunque no era una exigencia nueva, la lucha por la tierra se constituiría en centro de las banderas de lucha del CRIC. Desde entonces, esta organización ha disputado tierras históricamente arrebatadas a los pueblos indígenas. Sus contrincantes son los grandes terratenientes, los ingenios azucareros y a las multinacionales extractivistas que a punta de fuego y despojo se han apropiado del territorio que ancestralmente es el hogar de los pueblos indígenas del Cauca y de toda Colombia.
Esta lucha ha dejado un incontable número de víctimas al interior del proceso organizativo. Eso, sumado al conflicto armado colombiano, ha convertido a líderes sociales y defensores de Derechos Humanos en objetivo militar. Por eso hoy, a 50 años de la fundación de esta gran organización, el CRIC también exige respeto a la vida y a sus territorios.
Pero el CRIC no solo ha luchado por los pueblos indígenas; sus movilizaciones, mingas y procesos de recuperación de la Madre Tierra siembran a diario semillas de esperanza y fuerza en todas las comunidades colombianas que resisten el férreo neoliberalismo que azota al país.
“Lo que haremos es memoria histórica que nos va a permitir a nosotros recoger lo que hasta ahora se ha caminado y se ha venido proyectando siguiendo la orientación de nuestros ancestros, nuestros caciques, nuestros mayores. Hoy pues estamos caminando esa orientación para dejarle un camino y un sendero a nuestras próximas generaciones, para que puedan seguir viviendo con dignidad en los territorios indígenas no solamente del Cauca, sino del resto del país”, declara Giovanny Yule, Dinamizador Político del CRIC.
El evento de celebración y conmemoración sucederá en territorio caucano, del 19 al 24 de febrero. Se esperan más de 2.000 asistentes nacionales e internacionales. Dentro de la agenda se encuentran distintas actividades artísticas y muestras gastronómicas. Pero esencialmente se resaltan los espacios de diálogo de saberes desde dos miradas: los conocimientos propios de las comunidades indígenas y el conocimiento academicista.
Será un momento de construcción de memoria histórica, defensa de la vida y los derechos fundamentales de todas las comunidades indígenas. Así como un tributo certero a todos los líderes y lideresas caídos en los 50 años de lucha y organización.
