El Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC), un organismo internacional de derecho público y el único en el mundo con carácter paritario, cumple hoy, 24 de julio, 30 años de trabajo ininterrumpido por el desarrollo sostenible de los más de 45 millones de indígenas del Abya Yala, quienes representan el 8% de la población de América Latina y el Caribe y constituyen uno de los grupos con mayor número de personas en situación de vulnerabilidad social en el mundo, debido a su tradicional marginación y exclusión.
Creado en 1992 por la II Cumbre Iberoamericana de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Madrid, España, el FILAC tiene la misión de promover el Buen Vivir-Vivir Bien como alternativa de vida digna para los pueblos indígenas de América Latina y el Caribe, a través del ejercicio pleno de los derechos humanos y la interculturalidad.
En sus 30 años de historia, el FILAC asumió la necesidad de revisar, conocer y comprender el significado del desarrollo desde las distintas cosmovisiones de los pueblos indígenas. Además, el FILAC fortalece la voz de los pueblos indígenas de América Latina y el Caribe en los diferentes escenarios de debate y toma de decisiones, en los que presenta e impulsa iniciativas con visión integral orientados a cambiar el paradigma de desarrollo y retomar el legado de la sabiduría ancestral del Buen Vivir – Vivir Bien como una alternativa para garantizar la sostenibilidad ambiental y el respeto de los derechos fundamentales del ser humano.
Los programas emblemáticos
El FILAC orienta sus acciones por los lineamientos de su Plan Estratégico Institucional 2017-2027 “Cambiar con Sabiduría”, que define tres programas emblemáticos para la institución.
Con el programa “Diálogo y concertación” FILAC apoya la promoción o profundización de los procesos de diálogo que buscan definir, construir e implementar políticas públicas coherentes con el reconocimiento y protección de los derechos individuales y colectivos de los pueblos indígenas. Este programa tiene como principal herramienta el Observatorio Regional de Derechos de los Pueblos Indígenas (ORDPI).
El programa “Desarrollo Económico con identidad” está orientado a apoyar el diseño e implementación de procesos e iniciativas que promueven el desarrollo con identidad, enfocados al Buen Vivir-Vivir Bien de los pueblos indígenas. El principal instrumento de este programa es la Iniciativa de Cooperación Indígena (ICI), especialmente orientado a la lucha contra la pobreza y la discriminación. Con ese enfoque y la participación de diferentes pueblos indígenas, organizaciones regionales como la COICA, CAOI y CICA, redes de jóvenes y mujeres indígenas, además de aliados y socios de la cooperación internacional, entre 2020 y 2021 el FILAC apoyó la ejecución de 58 pequeños proyectos directamente desde las organizaciones indígenas, en 17 países y llegando a 15.264 familias indígenas
El programa “Educación para la equidad” está orientado a promover procesos interculturales de formación, investigación, construcción, sistematización y difusión de conocimientos, saberes y tecnologías indígenas. Este programa tiene como uno de sus dispositivos clave a la Universidad Indígena Intercultural (UII), una plataforma y, al mismo tiempo, una red de cooperación en pro de una educación superior intercultural que ofrece cursos cortos y diplomados de actualización y extensión universitaria, cursos de especialización y maestrías. Hasta la fecha, han pasado por las aulas de la UII más de 1300 estudiantes de 19 países de la región.
El FILAC promueve, además, los programas de jóvenes y mujeres indígenas, ejes fundamentales y transversales a todas las actividades que hace esta organización.
Con el programa de Mujer Indígena se busca fortalecer los procesos de empoderamiento económico, tanto individual como colectivo, e impulsar su participación política para reforzar sus capacidades para exigir el cumplimiento efectivo de sus derechos. Este trabajo se realiza en estrecha coordinación con las redes de mujeres, entre ellas las agrupadas en Mujeres Indígenas de América Latina y el Caribe (MILAC).
El Programa de Juventudes Indígenas del FILAC está orientado a empoderar a las juventudes para la promoción de sus derechos en el marco de un diálogo intergeneracional. Este programa fue elaborado mediante un proceso de consulta con las juventudes indígenas de la región, e integra contenidos y responde a las realidades de las juventudes indígenas en las tres áreas programáticas del FILAC. La Estrategia de Juventudes Indígenas del FILAC se elaboró con un enfoque de derechos humanos, interseccional y ecosocial, y tiene como ejes la promoción y el fortalecimiento de las estrategias conducentes a la igualdad de género y el intercambio de conocimientos intergeneracionales.
Además, el FILAC fue designado como Unidad Técnica de la Iniciativa Instituto Iberoamericano de Lenguas Indígenas (IIALI), cuyo objetivo es fomentar el uso, la conservación y el desarrollo de las más de 550 lenguas indígenas habladas en América Latina y el Caribe, apoyando los pueblos indígenas y los Estados en el ejercicio de los derechos culturales y lingüísticos y la preservación del patrimonio cultural.
Para su trabajo, el FILAC ha contado con el valioso apoyo de aliados y socios técnico y financieros de la cooperación internacional que comparten sus objetivos. Entre ellos destaca el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), la GIZ, la cooperación belga o la Fundación Ford,.
Mucho lo avanzado, más por hacer
El trabajo de FILAC en la promoción de derechos de los pueblos indígenas hizo que en la actualidad sea considerado como un “Patrimonio de los pueblos” y que recibiera el estatus de Observador Permanente de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Pero la crítica situación de la mayoría de los pueblos indígenas de la región exige emprender nuevas acciones con enfoque de derechos, visión integral y de políticas interculturales.
Como un esfuerzo de concertación para el autodesarrollo con identidad de los pueblos indígenas de América Latina y el Caribe, FILAC ha avanzado mucho en sus 30 años de historia, pero por la magnitud de los retos se necesita el esfuerzo concertado de todos para seguir adelante, para lo que la XVI Asamblea General celebrada en Madrid, España, supondrá un hito fundamental y una renovación de las alianzas forjadas a lo largo de tres décadas de historia de trabajo por el desarrollo sostenible y los derechos humanos.