SUECIA, Ago 22 (FILAC) – El Secretario Técnico del Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC), Alberto Pizarro participó el pasado 21 de agosto en la sesión titulada “Respeto, Reciprocidad, Relación: Pueblos Indígenas y Aguas Vivas”, organizada en el marco de la Semana Mundial del Agua 2023, donde destacó la importancia de los “Diálogos: El Agua desde la Cosmovisión de los Pueblos Indígenas”, conducidos por FILAC, en la generación de recomendaciones cruciales para el derecho humano al agua para los Pueblos Indígenas. Estas recomendaciones se plantearon en la Conferencia Mundial del Agua.
“El propósito de estos diálogos fue crear una plataforma para compartir y examinar las circunstancias de los Pueblos Indígenas en materia de agua en América Latina y el Caribe. Esta plataforma tuvo como objetivo facilitar avances en el desarrollo de una agenda compartida entre estas comunidades sobre el derecho humano al agua para su sustento. Además, los diálogos tuvieron como objetivo fomentar la contemplación y descubrir casos favorables de participación de los Pueblos Indígenas en la gestión y gobernanza del agua”, aseveró Pizarro.
FILAC organizó un total de cuatro diálogos con organizaciones indígenas regionales, jóvenes indígenas, mujeres indígenas de Abya Yala y representantes gubernamentales miembros del FILAC y entidades públicas responsables del agua.
Pizarro también compartió algunas de las recomendaciones que surgieron en este diálogo, entre las que destacan que: el agua es el origen y sustento de la vida, simbolizando la salud y la vitalidad. Su fluir es como el alma de nuestras comunidades, entrelazándose con nuestra esencia misma, sirviendo como medicina. La percepción del agua como un recurso compartido, cuando se gestiona adecuadamente, a partir de las prácticas integrales de los Pueblos Indígenas, tiene el potencial de beneficiar significativamente a toda la humanidad.
Entre otras recomendaciones están que la visión holística de los Pueblos Indígenas abarca el agua, el territorio y las lenguas como componentes interconectados. Estas facetas se perciben como entrelazadas, al igual que la combinación sinérgica de la sabiduría indígena con otros sistemas de conocimiento.
“Para nosotros, los ríos, las montañas y las selvas encarnan espíritus que salvaguardan estos reinos y están íntimamente ligados a nuestra existencia. Por lo tanto, cualquier daño infligido a estos elementos naturales, como la contaminación del agua, pone en peligro no sólo nuestra salud, sino que también perturba nuestra conexión profunda con la Madre Naturaleza y la Tierra”, resaltaron los participantes en los diálogos.
Pizarro también reconoció la importancia de utilizar en estos diálogos el Informe del Relator Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos humanos al agua potable y al saneamiento, Pedro Arrojo, apoyado por el Relator Especial de las Naciones Unidas sobre los derechos de los Pueblos Indígenas, Francisco Cali Tzay. “Este informe fue ampliamente difundido y sirvió de base para discusiones que involucraron a diversas organizaciones”, aseveró.
Estos diálogos significan un punto de partida, que requiere colaboración entre comunidades indígenas, gobiernos, instituciones de cooperación internacional y otras partes interesadas. Este esfuerzo colectivo tiene como objetivo garantizar que la financiación y las iniciativas se beneficien directamente. En este sentido, FILAC sirve como una entidad capaz de facilitar discusiones entre varias partes y garantizar que los proyectos se adapten a las necesidades de los pueblos indígenas vulnerables.