COLOMBIA, Oct 23 (FILAC) – El Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC), a través de su vicepresidenta Myrna Cunningham, reitera su firme compromiso de seguir proporcionando asistencia técnica y colaborar con diversas instituciones en la cooperación para implementar y fortalecer el Mecanismo Amazónico de los Pueblos Indígenas.
Los Pueblos Indígenas, que conforman alrededor del 5% de la población mundial, son responsables de la protección y conservación de aproximadamente el 80% de la biodiversidad restante en el planeta y contribuyen en un 25% a la retención de carbono mundial.
Durante el evento paralelo titulado “Los desafíos y retos del Grupo de Trabajo para el establecimiento del Mecanismo Amazónico de los Pueblos Indígenas”, organizado por la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA), Cunningham también instó a los países, organismos y agencias a unir esfuerzos para proteger la Amazonía a través del Mecanismo.
“FILAC fue uno de los organismos que respaldó e impulsó el establecimiento del Mecanismo Amazónico de los Pueblos Indígenas, así como su implementación, siguiendo lo estipulado en el párrafo 6 de la Declaración de Belém do Pará adoptada por los presidentes de los países miembros de la OTCA”, afirmó Cunningham.
Avances hacia la gobernanza paritaria
En la ciudad de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, se llevó a cabo un importante encuentro regional a principios de octubre. En él, los representantes de los gobiernos miembros de OTCA y los líderes de los Pueblos Indígenas de la región se reunieron para discutir el alcance y funcionamiento del Mecanismo Amazónico.
Durante este evento, se abordó la necesidad de garantizar una participación paritaria en la estructura y gobernanza del Mecanismo, así como su articulación con otras instancias como el Marco Mundial sobre Biodiversidad. Además, se estableció la importancia de la colaboración entre los Pueblos Indígenas, los Gobiernos Nacionales, la OTCA y otras organizaciones internacionales para asegurar un enfoque horizontal y participativo en el diseño del Mecanismo.
En este sentido, se acordó la creación de un Grupo de Trabajo Paritario, en el que tanto los Gobiernos como los Pueblos Indígenas trabajarán juntos en la definición de las bases y la estructura de su funcionamiento. Según mencionó Cunningham, este espacio de diálogo y concertación fue un paso crucial para asegurar la participación efectiva de los Pueblos Indígenas en la toma de decisiones que afectan sus territorios y sus formas de vida.
Financiamiento para su funcionamiento sostenido
Cunningham enfatizó en la urgencia de buscar cooperación internacional para asegurar el financiamiento necesario para el funcionamiento sostenido y efectivo de este importante Mecanismo. Al respecto, destaco que ocho países miembros de la OTCA cuentan con normas constitucionales (o su equivalente) que reconocen a los Pueblos Indígenas y sus derechos.
“Si bien la amplitud y profundidad de estos reconocimientos puede variar y los desarrollos legislativos pueden ser diversos, el estatus constitucional de ciudadanía para los Pueblos Indígenas, su capacidad jurídica para actuar en el marco del Estado y su derecho a participar en la gestión de los asuntos que les conciernen están garantizados de alguna manera”, expresó.
Agregó que siete de los ocho países se adhirieron a la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas en 2007, asumiendo el compromiso político de facilitar el ejercicio de sus derechos colectivos.
Asimismo, seis de estos países son partes del Convenio 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que establece la obligación de consultar y obtener el consentimiento previo, libre e informado de los Pueblos Indígenas para cualquier medida ejecutiva o legislativa que afecte el ejercicio de sus derechos.
Además, Cunningham destacó que el Mecanismo de la Amazonía se alinea con el enfoque de los Pueblos Indígenas para una participación plena y efectiva. “Para ser efectivo, el Mecanismo debe ser permanente, y aquí quiero enfatizar por qué debe ser permanente, porque si el mecanismo no opera de manera continua y no es de carácter paritario, es decir, con la participación de representantes tanto del Gobierno como de los Pueblos Indígenas, no habrá igualdad de condiciones, y difícilmente se considerarán sus conocimientos, experiencia y buenas prácticas. Ser otro mecanismo inútil no es una opción”, advirtió.
Además, subrayó en la necesidad de fortalecer la participación desde la perspectiva amazónica en la Plataforma de Comunidades Locales y Pueblos Indígenas de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático, en coordinación con el Mecanismo de los Pueblos Indígenas de la Amazonía, así como con las metas del Marco Global de Biodiversidad.
