En las últimas dos semanas los pueblos indígenas de Centroamérica han vivido los embates de diversas tormentas tropicales, deslaves, desbordamientos de cauces de agua, inundaciones por barriadas y cierres de vías, son algunos de los problemas generados por las lluvias de Eta, el último huracán que pasó causando innumerables daños por Panamá, Costa Rica, México, Honduras, Nicaragua y Guatemala.
Las zonas más damnificadas, son las habitadas por los Pueblos Indígenas que viven en las costas de estos países. Lastimosamente en todo este tiempo los Pueblos Indígenas, de esta región, apenas se están recuperando de los embates de la Pandemia de COVID-19 y ahora tras sufrir las consecuencias de ETA, existe alta probabilidad de tener que soportar la fuerza de IOTA, la segunda tormenta tropical que amenaza en convertirse en Huracán categoría 4.
Nicaragua, Guatemala y Honduras fueron blanco directo de la fuerza destructora del poderoso huracán ETA que entró por la costa nicaragüense con fuertes lluvias y vientos sostenidos de hasta 220 km/h. Varias comunidades quedaron inundadas y algunas quedaron incomunicadas después de que varios puentes fueran arrastrados por las corrientes de los ríos. Hay comunidades enteras que han desaparecido. La Comunidad de Quejá en Guatemala quedó según un gobernador de la zona, como un camposanto por efectos de ETA.
Ante la gravedad de este panorama, desde el Fondo de Desarrollo de los Pueblos Indígenas para América Latina y el Caribe instamos a las autoridades tanto nacionales como regionales a prestar la mayor ayuda posible a las comunidades y territorios indígenas que están siendo nuevamente vulnerabilizados, esta vez por los desastres naturales. Sabemos que los gobiernos, de los países afectados, se encuentran en estado de alerta y emergencia para resguardar la vida de sus habitantes; sin embargo, los instamos a poner especial atención a lo que acontece en los territorios indígenas a los cuales la ayuda o no llega o llega tarde. Lo primordial es salvar vidas, pero salvarlas también es establecer un plan de auxilio para salvaguardar su derecho a la vivienda, la alimentación y la educación. Recordemos que en esos países se tiene una riqueza cultural invaluable, con más de 100 idiomas y culturas que debemos preservar prioritariamente.
IOTA a punto de llegar a Honduras y Nicaragua
IOTA, que la tarde del domingo 15 de noviembre se intensificó en huracán categoría 2, se acerca hacia Nicaragua y Honduras, países azotados y que ahora se alistan para recibir el impacto de lo que en las próximas horas puede llegar a ser un huracán mayor de categoría 4.
Según lo previsto por el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos, Iota se intensifica y puede ser un huracán “extremadamente peligroso” de categoría 4 “Se esperan vientos potencialmente catastróficos y marejadas ciclónicas amenazantes a la vida a lo largo de la costa noreste de Nicaragua y este de Honduras”, dice el boletín oficial más reciente de dicho centro.