El grupo de jóvenes Anmar Yarmar Ular – Anyar recuperan la medicina y los alimentos indígenas ancestrales de su región, en Panamá, como parte de un proyecto impulsado por el Fondo Kolom No’ooj (Recuperando conocimientos), creado por el Fondo para el Desarrollo de Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (FILAC).
El proyecto llamado “Recuperación, preservación y uso de los conocimientos ancestrales en medicina tradicional y plantas medicinales dirigido a jóvenes indígenas” coadyuva a la preservación y uso de los conocimientos ancestrales en medicina tradicional y plantas medicinales dirigidos a jóvenes indígenas.
El Fondo Kolom No’ooj fue constituido por FILAC y la Red de Jóvenes indígenas de América Latina y el Caribe, y cuenta con el apoyo solidario de las Fundaciones Pawanka, Lush, y Ford, financiando iniciativas de recuperación de saberes indígenas mediante el dialogo intergeneracional.
El cambio de los hábitos alimenticios se acentuó en los últimos años en los que varias comunidades habían dejado de producir sus alimentos tradiciones para sembrar productos destinados al mercado, dejando de lado propia seguridad y la soberanía de los pueblos. Sin embargo, durante la pandemia de la COVID-19 se hizo frecuente el recurrir a la medicina tradicional indígena para hacer frente a los estragos que el virus provocaba.
En ese proceso los jóvenes indígenas Guna se reunieron en encuentros con los Inadurgan, médicos tradicionales, para que ellos los ayuden a identificar especies y variedades de plantas medicinales y alimenticias las que luego fueron recolectadas, primero, y cultivadas luego en viveros y huertas comunales. Los Indurgan compartieron sus conocimientos, y al hacerlo se sintieron orgullosos y motivados por el interés de la juventud indígena.
Con los conocimientos adquiridos, los jóvenes desarrollaron diferentes jornadas de trabajo, en las que se identificaron especies y variedades, lugares para su provisión o recolección y la implementación de las parcelas comunitarias. Estas actividades permitieron, no solo intercambiar conocimientos, sino retomar los dulces cantos por medio de los que los cuales los Gunas transmiten sus conocimientos.
En el pueblo Guna en Panamá, todos los conocimientos y tradiciones son transmitidos por medio de cantos. Según sus tradiciones orales, los abuelos y abuelas así lo recibieron y los transmitieron de generación en generación; sin embargo, algunas de las condiciones que produce la modernidad hacen que ese canto sea cada vez menos frecuente, en especial aquellos que transmiten la lengua, cultura y los conocimientos sobre las costumbres, alimentos y la medicina tradicional indígena.