“La conmemoración de un nuevo Día Internacional de la Mujer, en este entorno de pandemia y a más de 25 años de Beijing, tiene que ser un momento que nos sirva para aunar esfuerzos para promover los cambios legislativos, institucionales y sobre todo culturales que nos permita dar pasos sólidos para avanzar en la realización de los derechos individuales y colectivos de las mujeres indígenas”, fue una de las principales conclusiones a las que arribaron, este 8 de marzo, mujeres indígenas del Abya Yala, durante el Webinar “Mujeres Indígenas forjando un futuro más igualitario en el Contexto del Covid-19”.
Asimismo, resaltaron que este Día Internacional de la Mujer se ha visto afectado por la pandemia, por la pérdida de vidas y retrocesos para las mujeres. Sin embargo, ello no impide celebrar y renovar compromisos por los derechos de aquellas mujeres indígenas.
Por ende, este es un día para reflexionar, renovar compromisos y sueños. Hay una Profunda paradoja: la pandemia impacta de forma desproporcionada en mujeres y niñas; pero a la vez, las mismas mujeres han demostrado resiliencia para contener y responder a la pandemia.
Durante la pandemia, señalaron, que aprendieron sobre la importancia de la comunidad como lo ha demostrado la Plataforma Regional Indígena, el regreso a lo público, la importancia de los Estados, la voz y acciones de las mujeres indígenas.
Informe revela que aún falta un largo camino por recorrer
En el marco de este Webinar también se presentó el informe “Derechos de las Mujeres Indígenas. A 25 años de la Declaración de Beijing”, elaborado por FILAC y ONU Mujeres, el cual analiza tanto la legislación la institucionalidad estatal relacionada con las mujeres indígenas en los países de la región.
En este estudio, las mujeres indígenas constaron que, si bien existen iniciativas y algunos esfuerzos destacados, todavía queda un largo camino por recorrer. La legislación y los marcos institucionales específicos son pocos y en general atienden aspectos puntuales, pero no el conjunto de los derechos de las mujeres indígenas.
Asimismo, muestra un análisis detallado sobre resiliencia, errores y límites de la legislación, así como, esfuerzos importantes de los Estados. Como dice el informe, “las lideresas indígenas han mostrado siempre el mejor camino para resolver los problemas”.
Hoy más que nunca, se requiere contar con información de primera mano como la que presentan las organizaciones indígenas ante la CEDAW, asimismo, hay mayor conciencia global sobre la necesidad de protegerlas.
La realidad demuestra que, sin una legislación e instituciones sólidas, es muy difícil pensar que puedan existir políticas públicas adecuadas a favor de las mujeres indígenas.
Ante ello, resaltaron que es muy importante tener presente que las mujeres indígenas deben participar desde un inicio en el diseño y puesta en funcionamiento de la legislación e institucionalidad que le incumbe.
Combatir las desigualdades en la región
Las participantes también dieron a conocer que los Estados y la sociedad en general tienen la obligación de combatir la aritmética de las desigualdades en esta región que es epicentro de la crisis desencadenada por la COVID-19 y que afecta principalmente a jóvenes y niñas indígenas y afrodescendientes.
Enfatizaron en que las mujeres indígenas son excluidas de cargos de poder, por razones históricas, por la carga del cuidado familiar, bajos salarios y son elementos que impiden que las mujeres participen en el ámbito público. Se trata de redistribuir el poder de forma equitativa entre mujeres y hombres.
Asimismo, resaltaron que: “Toda la sociedad debe aprender de las mujeres indígenas son agentes de transformación y de contribución a la biodiversidad”.
Las mujeres continúan en lucha contra todas las violencias que enfrentan y que profundizan las desigualdades. Violencia machistas y patriarcales, además la violencia racista y capitalista, ante ello exigieron diseñar y aplicar políticas para las mujeres indígenas que incluyen la violencia y el acceso a la justicia.
En este contexto, el FILAC y el MILAC, invitaron, en este Día Internacional de la Mujer, a los Estados, a los organismos internacionales, a las organizaciones indígenas y a todas las personas en general, a sumarse a este esfuerzo.
La actividad contó con la participación de la Dra. Mirna Cunningham, presidenta del FILAC; Gladys Acosta, Presidenta de CEDAW; María Fernanda Espinosa, Embajadora de Buena Voluntad del FILAC, Ex presidenta de la Asamblea General de la ONU; Ana Güezmes, Directora de la División de Asuntos de Género de la CEPAL; Diana Espinosa, Oficial Nacional de Programas de la Oficina de Colombia de Onu Mujeres; Otilia Lux de Cotí, Asesora del MILAC; Jean Gough, Directora Regional de UNICEF para Latinoamérica; Irma Pineda, Experta Independiente del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas; Aida Quilcue, CRIC; Melania Canales, ECMIA; Florina López, RMIB; Fany Kuiru, COICA; Sonia Astuhuamán, Coordinadora de Mujeres Indígenas de la CAOI; Jessica Vega Ortega, Red de Jóvenes Indígenas ALC; Olga Montufar, Red de Personas Indígenas con Discapacidad y el Secretario Técnico del FIlac, Gabriel Muyuy. Las conclusiones fueron dadas a conocer por Hortensia Hidalgo, Candidata Constituyente Chile y Dali Angel, Coordinadora de la Unidad de Juventud y Mujer Indígena del FILAC.
También acompañaron la ceremonia espiritual Bélica Sapón, Bibiana Ramírez y Ortencia Simon egresadas del Diplomado Regional de Fortalecimiento del Liderazgo de Mujeres Indígenas.
