El Fondo para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas de América Latina y el Caribe (Filac) ha presentado en un foro de las Naciones Unidas un sistema de monitoreo en asuntos de derechos de las mujeres y niñas indígenas y abordará aspectos sobre la economía indígena y la protección de la Amazonía.
El Filac participa en la 23 Sesión del Foro Permanente de las Naciones Unidas para las Cuestiones Indígenas, entre el 15 y 26 de abril en Nueva York, con eventos propios y paralelos, según ha informado a EFE el secretario técnico del Filac, Alberto Pizarro.
El sistema de monitoreo parte de la ‘Recomendación General 39’ sobre los derechos de las mujeres y niñas indígenas, de 2022, que deriva de la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (Cedaw, en inglés), aprobada en 1979.
La ‘Recomendación General 39’ busca orientar a los Estados en el cumplimiento de medidas legales y políticas de otra naturaleza para garantizar que cumplan sus obligaciones en la protección de los derechos de las mujeres y niñas indígenas, tal como menciona la Cedaw.
Derechos de los Pueblos Indigenas
“Pareciera que en la actualidad se han conquistado los derechos de los pueblos indígenas (…) sin embargo, hay una gran brecha en la implementación a nivel nacional, a nivel de cada uno de los países”, ha asegurado a EFE la coordinadora del programa Juventudes y Mujeres Indígenas del Filac, Dali Ángel.
Ángel menciona que las organizaciones indígenas de mujeres plantearon que la ‘Recomendación General 39’ no quede “archivada”, por lo que pidieron que se implemente en los países de América Latina y es por eso que nace la propuesta.
“Este mecanismo de monitoreo es el primero a nivel regional y global que estamos impulsando desde el Filac, porque queremos un mecanismo paritario, de los Estados y de las organizaciones indígenas”, enfatiza.
Economia Indígena
Pizarro menciona que en el foro de las Naciones Unidas se ha abordado la economía indígena, entendida como una actividad “propia” y que difiere de la llamada economía verde.
La economía indígena se basa en el respeto a la naturaleza y una aplicación “sustentable” del manejo de los recursos “y que permita que los pueblos indígenas permanezcan en su territorio y no se vean obligados a migrar forzadamente a las ciudades“, puntualiza.
Asimismo, menciona que lo anterior está ligado con el “respeto a los derechos individuales y colectivos” de las poblaciones nativas y los procesos de “consulta previa, libre e informada”.
Pizarro dice que en Latinoamérica muchas veces “no se respetan” esos procesos en las regiones habitadas por grupos originarios y que “se llevan a cabo inversiones extractivistas, enfocadas a la deforestación o la minería que muchas veces no respetan los derechos indígenas“.
A este aspecto se suma la creación de un mecanismo de protección de la Amazonía, una labor en la que participará Filac por invitación de la Organización del Tratado de Coopperación Amazónica(OTCA), entidad que hará un evento paralelo para analizar las oportunidades del establecimiento del Mecanismo Amazónico de Pueblos Indígenas.
Además, Filac participa junto a la Vicepresidencia de Bolivia en el foro de las Naciones Unidas para analizar “cómo los códigos del ‘Buen Vivir’ (‘Vivir Bien’, en Bolivia) se traducen en políticas públicas“, agrega Pizarro.