“En enero enterramos casi cuatro jóvenes por semana en Silvia”, cuenta Ancizar* un líder del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC) que pidió mantener su identidad en reserva por las constantes amenazas que ha recibido su organización. Los jóvenes a los que se refiere, según denuncias de la comunidad, habían sido reclutados por grupos armados ilegales y fallecido en combate.
Fuente/El Espectador/más información aqui